A UN NIÑO DE CUATRO AÑOS


"Cuando se muere la carne
el Alma va derechito 
a saludar a la Luna 
y de paso al Lucerito".
Violeta Parra.

De vuelta en tus entrañas
de nubes y vapor
mi misión fue muy corta
y entregué con honor
mi cuerpo pequeñito,
mis sonrisas, mi voz...

El árbol doblegado
se humilló sobre mí
para llevarme entero,
para hacerme subir.

Mi padre y mi madre
van a pensarme más
desde hoy para siempre
como el niño que fui.

Escrito en el misterio
quedo a partir de hoy
en el Retiro, el viento
y un manto de verdor.

Me acarician las ramas
cosquillas en mi piel
los pájaros volaron
y mi vida también.

Yo ya estoy en el parque
que llaman El Edén
con los ángeles juego
tú no me puedes ver

Como dijo Violeta
en aquel baquiní
saludar a la luna
me hace sentir feliz.

©Leibi Ng

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